El Wellness Organizacional desembarca en la empresa

¿Otro palabro? Más o menos. Pero si te decimos que su objetivo es que la empresa esté siempre sana, la cosa cambia. Pero no se trata de que esté sana desde el punto de vista financiero, sino que su personal goce de buena salud y así pueda rendir más. Y ya está entrando en algunas de nuestras empresas. ¿Quieres conocer sus características? ¡Vamos con ellas!

Una empresa sana compite mejor en el mercado. Eso es de Perogrullo. Si dispone de músculo financiero, podrá hacer lo que quiera, comprar lo que necesite, adquirir otras compañías, etcétera. Pero, ¿y si sus empleados son más sanos?, ¿qué pasa? Que rendirían más, ¿no? 

Pues de eso se encarga el Wellness Organizacional, cuyo objetivo no es otro que lograr un equilibrio de los equipos de trabajo que componen una empresa. Que viene a ser, en cristiano, y para dejarlo más claro, mejorar la calidad de la vida laboral y personal de cada uno de sus trabajadores. «¡Aquí quería yo llegar!», dirá alguno. «La conciliación de toda la vida, vamos», seguro que estarás diciendo a la vez que lees estas líneas. Sí, pero no.

«Entonces, ¿qué diantres hace el Wellness Organizacional?», estarás insistiendo. Calma, que vamos con la explicación. Se trata de una técnica que busca el bienestar integral tanto de la empresa como de las personas que en ella trabajan. Es decir: un buen clima laboral, que puede llegar a ser tan importante como que sus finanzas gocen de buena salud. Y para eso el empleado debe estar bien tanto dentro como fuera del trabajo. ¿Cómo? Apostando por medidas que reduzcan los índices de estrés laboral, lo que también se traducirá también en una reducción del gasto en atención médica que precisan los empleados en cualquier momento. Y ya se sabe: una buena salud siempre se traduce en un estado de optimismo que redunda en una mayor productividad del trabajador.

¿Qué hace falta para que una empresa implante el Wellness organizacional en su estructura? Poner en marcha un programa que se dedique a diagnosticar el estado de salud de los trabajadores, qué carga de trabajo tienen, sus necesidades de capacitación, de cómo afectará todo eso a su rendimiento y la aparición del estrés laboral…

Y esto dará lugar a una nueva profesión, el experto en Wellness Organizacional, que se encargará de identificar los problemas y habilidades de las personas, de evaluar al equipo y creará unas pautas de trabajo que irán desde sugerencias de alimentación y ejercicio hasta los distintos cursos de capacitación que necesitará un trabajador para alcanzar su máximo potencial. Sin olvidar su vertiente motivadora, muy útil para cambiar malos hábitos y mantener un estilo de vida equilibrado desde un punto de vista físico, mental y social.

¿Qué te parece esta nueva tendencia? ¿Quieres contarnos tu opinión?

FUENTE: El economista