Y tú ¿cómo diseñas tu puesto de trabajo?

El diseño de tu espacio de trabajo influye en tu desempeño laboral

Pasas muchas horas en tu puesto de trabajo, así que ¿por qué no diseñarlo de tal manera que puedas trabajar a gusto en él? Eso, sin duda, redundará en tu productividad.

Puedes llegar al trabajo más que descansado después de dormir las horas necesarias y también tener una relación extraordinaria con tus compañeros, pero como tu puesto de trabajo no esté en condiciones… ¿A que no te apetece demasiado trabajar en él?

Por eso, el diseño de tu espacio de trabajo ayuda a generar el que tú desees y en las condiciones que quieras. Por ejemplo, gozando de las condiciones de luz adecuadas para trabajar. Hay estudios que reconocen que los espacios poco iluminados o una vestimenta demasiado oscura a la hora de trabajar generan sensaciones negativas entre el personal. O sea, ganas de trabajar, las justas.

¿Qué supone eso? Que las empresas apuesten por dotar a dichos puestos de trabajo de las mejores condiciones posibles. Empezando por los colores, como es el caso del empleo de los neutros —blanco, rosa pastel, azul claro o beige—, que generan mayor concentración y sentido de limpieza; siguiendo por evitar el uso de colores brillantes o fluorescentes, sobre todo en el suelo, lo que genera un gran rechazo en el trabajador. En este sentido, los espacios amplios con luz natural y plantas ayudan al trabajador a relajarse y aumentar su desempeño.

Y algo muy importante: eliminar los cubículos apostando por espacios abiertos y escritorios en fila generan áreas de convivencia y, por consiguiente, fomenta la creatividad de los empleados.

Todo con tal de que la persona se encuentre a gusto en el trabajo, lo que le permitirá disfrutar más del día a día. Que no es poco, ¿verdad?

FUENTE: El economista