Modelo Carma: cómo crear un buen ambiente en el trabajo

¿A que alguna que otra vez has escuchado la palabra Carma? Posiblemente, de ser así, te suene con K, pero no con C. Bien. Pues que sepas que se trata de un modelo. Un modelo que explica lo que significa crear un buen ambiente en el trabajo.

¿A qué aspira una empresa sea cual sea su tamaño? A que sus trabajadores trabajen a gusto, con ganas y de tal forma que la productividad se mantenga siempre en alto. Y esto es así porque las empresas que se preocupan por la felicidad de sus empleados obtienen mejores resultados. 

Y es que, aunque parece algo de rabiosa actualidad, la búsqueda de la felicidad en la empresa es algo que ha ocupado desde hace tiempo a investigadores y estudiosos de diversa índole. Es el caso del profesor Michael F. Steger. Y tras estudiar detenidamente aquellas empresas que ya apostaban por la felicidad en su día a día, decidió crear un modelo. Y lo llamó Carma. Sí, como Karma, pero sin K, aunque sus efectos casi se pueden considerar parecidos por el bien que ofrece a las empresas que lo adoptan.

¿En qué consiste el Modelo Carma? En una serie de valores que, unidos, se traducen en la creación de un ambiente óptimo en la oficina. Es decir: en la realización de la felicidad en el entorno laboral.

Y es que el Carma se compone de las siguientes variables:

· C de Claridad, cuyo propósito es definir la dirección y el destino de la empresa. ¿Para qué? Para mantener el rumbo de la empresa cuando se presenten cambios o vengan mal dadas.

· A de Autonomía. Es decir: la empresa debe permitir la autonomía de sus trabajadores, dejar que se autodirijan en la medida de lo posible —sí, sabemos que esta idea puede chirriar en más de un oído—, que intercambien ideas o bien que propongan nuevos procedimientos.

· R de Respeto: el líder es el modelo que seguir. Pero, para ello, debe fomentar el respeto pues éste es el primer elemento necesario para que se generen conexiones positivas dentro de la empresa.

· M de Magnitud: la empresa debe comunicar a sus empleados lo importante que es su trabajo, su desempeño diario. Y eso requiere conocer de manera frecuente su labor individual y en equipo.

· A de Autenticidad. Las empresas han de ser congruentes con sus decisiones y actos. Eso implica no pedir acciones que la misma empresa no sea capaz de implementar o desarrollar.

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