Píldora de la Felicidad 3: sé agradecido/a

¿Conoces aquello de 'de ser bien nacido es ser agradecido'? Ser agradecido influye de manera positiva en tu felicidad. Y es fácil sentirte agradecido; sólo tienes que seguir unas sencillas pautas todos los días. Las que te contamos a continuación.

Antes de empezar, ¿te has perdido nuestras dos primeras píldoras de la felicidad? Antes de empezar a leer puedes tomarlas a tu ritmo:

· Píldora 0

· Píldora 1

· Píldora 2

Sentir GRATITUD es una de las emociones que nos producen un mayor nivel de bienestar. Cuando somos conscientes de lo que hay de bueno en nuestras vidas, la percibimos de manera positiva. Centrarnos en aquello por lo que sentimos gratitud produce optimismo y felicidad.

Tal Ben Shahar menciona en su libro Practicar Felicidad un experimento realizado por los psicólogos Robert Emmons y Michael McCulough, en el que medían las diferencias entre un grupo experimental que escribía cada día al menos cinco cosas por las que se sentían agradecidos y un grupo control que no lo hacía. Las diferencias fueron evidentes para el grupo experimental:

· Desarrollaron una mayor capacidad para apreciar su propia vida, ya que reflexionaban diariamente a propósito de lo que de positivo existía.

· Experimentaron niveles más elevados de bienestar personal y emociones positivas

· Se sentían más asertivos, enérgicos y optimistas. Más felices, en suma.

· Dormían mejor y enfermaban menos.

Enfocarse en lo que ha tenido de positivo el día puede convertirse en un hábito. Recuerda la manera en que hablábamos en la primera píldora de introducir rituales en nuestra vida para terminar consiguiendo hábitos. Sentir agradecimiento por nuestra vida puede ser un hábito fuertemente placentero y puede contribuir a que ganemos felicidad.

Resumen: Introducir el ritual hasta que consigas el hábito:

1. Cada día de la semana, escribe al menos cinco cosas por las que te sientas agradecido. Cuando lo hagas, intenta no sólo recordar hechos, sino también revivirlos. La clave es mantener la mente consciente en la emoción, no sólo nombrar.

2. Después de la primera semana de practicar diariamente, mantén el ejercicio al menos una vez por semana. Dicen que aquello a lo que concedemos nuestra atención se expande en nuestra vida.

3. Puedes realizar este ejercicio semanal solo o acompañado por tu pareja o por cualquier otra persona de confianza. En ocasiones, se produce un refuerzo mutuo y es más fácil comentar lo bueno que ha ocurrido con alguien que registrarlo en papel.

Si necesitas más información, puedes escribirnos a info@emotionhr.com.