Claves del ‘Mindful Eating’
Sanar tu intestino puede cambiar
tu vida
¿Sabías que si mejoras tu salud
intestinal puedes sentirte con menos estrés, entre otras cosas? Quizás te pueda
resultar extraño, e incluso poner cara rara al escucharlo, pero es completamente
cierto.
En la última jornada motivacional
que impartí hice un hueco para hablar del Mindfulness
Eating o Mindful Eating a los empleados
de la empresa protagonista de la jornada. ¿Por qué? Porque la felicidad laboral
comienza por la personal, y la personal tiene como punto de partida una buena
salud intestinal.
Y es así. Porque intestino y cerebro
mantienen una gran y oculta relación a nuestros ojos. Y si bien los expertos en
salud ya tenían claro que la salud mental impacta de manera directa en el intestino,
ahora también han demostrado que una buena salud intestinal también afecta sobremanera a tu cerebro.
¿A que sufres cólicos o sientes
malestar en el estómago cuando tienes estrés? Pues si cuidas tu intestino, también
conocerás lo que es gozar de una buena salud mental. Todo se basa en mantener
en equilibrio tu microbioma intestinal. Es decir, que cuanto menos molestias
sientas en tu intestino, mejor funcionará tu cabeza. Y para eso sólo tienes que
seguir estos pasos sencillos:
· Consume alimentos que contengan
bacterias beneficiosas para tu intestino, como es el caso de alimentos cultivados
o fermentados, kéfir de agua o leche, kombucha, etcétera.
· Lava bien tus platos después de
comer, eliminando así restos de bacterias que podrían alojarse en tu intestino
y causarte molestias.
· Realiza ejercicio o bien desarrolla
una actividad física de manera regular.
En definitiva, simples pasos, muy
sencillos, para hacer de tu intestino un lugar feliz, que posteriormente repercutirá
en tu salud mental. Para que veas que ser feliz es simplemente cuestión de
proponértelo cuando quieras.
FUENTE: Mindfull Eating
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