Organiza tu estilo de vida y tu trabajo con el mindfulness

Se trata de una poderosa herramienta para mejorar tu calidad de vida y que tiene un impacto positivo en los entornos corporativos 

Hay maneras y maneras de afrontar el trabajo sin que tu calidad de vida se resienta. Una de ellas es el mindfulness, que te permite liberarte del estrés sin perder efectividad a la hora de cumplir con tus tareas profesionales.

Partamos de una premisa: hay que trabajar porque hay que vivir, pero no hay que vivir para trabajar; o al menos no hay que convertir el trabajo en una condena, ni tampoco en nuestra referencia vital. Todo depende de la manera conque te lo tomes. Y ahí el mindfulness te puede servir de ayuda.

Entre otras cosas, porque se trata de una práctica que te permite estar presente, sin juicio, y ver las posibilidades —todas— que tienes a tu alrededor, de tal manera que siempre podrás elegir qué te interesa y qué no según el momento y no dispersarte con varias cosas a la vez. Se trata de hacer bien lo que vayas a hacer, y no de malgastar tus energías en distintas y con resultados que para nada te reconfortan.

Aunque más que de práctica habría que hablar de estilo de vida. Sí, porque el mindfulness es eso; una técnica que cambia la corteza de tu cerebro, tu química corporal y a ti mismo para que puedas sentir y vivir de manera diferente. Hasta el punto de convertirse en un ser que hace desde la conciencia y que no es reactivo.

De ahí que, en lo que al trabajo respecta, sea una excelente herramienta para desarrollar la capacidad de inteligencia emocional que incluye empatía, resiliencia, conocimiento de uno mismo, manejo de las emociones; y como seres humanos tenemos emociones similares pero las vivimos de manera distinta, con la práctica del mindfulness uno conoce mejor lo que sucede con nuestra mente.

Y si estás estresado/a y te absorben numerosas tareas que, finalmente, te distraen y estresen, con esta práctica te percatas de qué es lo que te distrae y te trae de vuelta para una conexión mayor con el presente; y enfocándote en lo que es verdaderamente importante.