Por qué es tan necesaria la autoconfianza

¿Qué quieres ser o aspiras a conseguir? ¿Ya lo has logrado? ¡Felicidades? ¡Ah!, que no. Y eso, ¿por qué? Porque no confías en ti mismo. Grave problema, sin duda. Que no imposible de resolver, pues se puede. Y si quieres, puedes empezar en cualquier momento. Ahora, sin ir más lejos. ¿Te animas? 

La autoconfianza es fundamental. Nos permite desarrollarnos como personas, perseguir un sueño o deseo y alcanzar lo que siempre hemos querido ser o nos hemos propuesto. Por eso es importante tenerla lo más alto posible.

¿Qué ocurre? Que en ocasiones esto no es así, no es todo tan bonito, ni tan perfecto. Ocurre cuando dices que algo es imposible de conseguir, o lo ves tan lejano por las razones que sean -las tuyas, las que tú te levantas en tu camino- que ni siquiera lo quieres intentar. Grave error, sin duda. Porque nuestra cabeza, y con ello lo que traslada a nuestro ánimo, es el principal obstáculo a superar. En la cabeza está todo: lo mejor y lo peor de nosotros. Y si tenemos pensamientos negativos y esos pensamientos negativos nos gobiernan, la consecuencia es una autoestima baja, por los suelos. Porque lo que pensamos nos afecta, y más de lo que crees; afecta a tu motivación, a tu manera de ver las cosas, a tu manera de actuar, de enfrentarte al mundo.

En definitiva, un gran obstáculo. Que no insalvable.

Vale, pero, ¿cómo?, te preguntarás. Se trata de desarrollar la motivación propia, que es la base de la autoconfianza. Y es esencial a la hora de sentar las bases de tu desarrollo personal y profesional. Motivación para superar problemas, para dejarlos atrás, para conformar una serie de creencias e ideales que te impulsen a alcanzar los propósitos e ideas que tengas en la cabeza. Y, sobre todo, para dejar atrás las creencias que te impiden desarrollarte y dar rienda suelta a tu autoconfianza, a salir de la espiral de la desconfianza, ésa que te empuja hacia abajo y que no te permite ser lo que quieres ser. 

Sentir, creer, ser tú mismo. Alcanzar ese propósito y luchar para conseguirlo. En eso consiste la autoconfianza. Porque si crees y trabajas, puedes. No hay más fórmula para lograrlo.

Y si necesitas un empujón, pídenoslo. Te lo daremos gustosamente.