Tendrías una puerta y el universo se colaría...

La calidad de tus pensamientos es la que determina que seas más o menos feliz, que alcances más o menos todo aquello que te propongas. Cuanto más alegres y positivos sea, mejor te irá.

Este fragmento de la película Come, Reza, Ama (2010) es el que contiene para mí el gran mensaje: “Si pudieras despejar todo el espacio que ocupas en tu mente por obsesionarte con (victimismo, envidia, miedos, culpa, juicios... Cada uno lo suyo), tendrías una puerta y ¿sabes lo que haría el universo al verla? Colarse. Se colaría y te llenaría del amor que jamás hayas podido anhelar”.

Me ayuda a recordar que normalmente centramos nuestra atención en este tipo de pensamientos negativos tales como la envida, los celos, los miedos, que consiguen que nos hagamos daño a nosotros mismos. 

Nos empeñamos en hacernos sufrir a través de nuestro pensamiento, repetitivo y dañino. A lo largo del día tenemos algo así como 60.000 pensamientos, de los cuales el 90% son repetitivos y de esos, el 85% son negativos. 

Si dejáramos de prestar atención a estos pensamientos, parándolos, intentando cambiar la atención hacia el presente, centrándonos en temas que generan valor a nuestra vida, podríamos llenar el espacio dedicado al dolor que nos provocamos con sentimientos de amor y alegría. Es una elección.

Tú decides si te dañas o te proporcionas alegría y amor. Todo depende de la calidad de tus pensamientos.