Claves para gestionar habilidades directivas

No hace mucho hablábamos en este blog del jefe como condición innata o bien aprendida a lo largo de muchos años de formación. Cada cual tendrá su teoría, como es lógico, pero queremos creer que el jefe también se hace paso a paso. Y, en este sentido, puede adquirir una serie de habilidades directivas que lo harán mejor jefe si cabe. Todo es cuestión de tiempo.

Dejemos de lado la condición innata del jefe, ése que posee las características necesarias para manejar cualquier equipo, sea cual sea su tamaño, para centrarnos en el que no las tiene, sino que las aprende. Y lo hace convencido de que, a fuerza de interiorizar conceptos, de desarrollar lo aprendido, de poner en práctica todo el saber acumulado, acabará siendo un buen jefe. ¿Por qué no?

¡Claro que lo puede ser! Ya mencionábamos en este post que los jefes que lo son por selección natural, que poseen un don y lo saben manejar a la perfección, son únicos. Se los ve a distancia, destacan, sus cualidades son únicas. Están destinados para mandar, para conducir a sus equipos hasta el triunfo seguros de que así ocurrirán porque conocen las claves para lograrlo. Equipos que creen en ellos, que harán lo posible y lo imposible por cumplir sus órdenes.

Pero también está el otro jefe, el que es producto de la constancia, del esfuerzo, del aprendizaje. Ese jefe que parte desde lo más bajo y que va adquiriendo nuevas competencias, va conociendo nuevas herramientas, descubre aspectos inéditos relacionados con su responsabilidad, o bien perfecciona su conocimiento de las que ya maneja, de las más habituales. Sin duda, un proceso apasionante que va forjando una personalidad llamada a ser única y, como en el caso del líder innato, destinada a dirigir cualquier tipo de equipo.

Un jefe tan válido como el innato. Un jefe que conoce todos los trucos y habilidades per sé, que sabe motivar a sus equipos, que conoce los tiempos y su manejo, que controla la mejor manera de motivar a sus equipos, sabe qué teclas apretar y en qué momento para lograr los resultados que desea alcanzar… Y que no duda en delegar cuando es necesario ni al que tampoco le tiembla el pulso si se trata de resolver conflictos.

Ése es el jefe que se hace. ¿Quieres ser tú uno de ellos? En este curso de formación ponemos a tu disposición las principales habilidades directivas. Aprenderlas es cosa tuya.

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