Encuentra la fuente de la felicidad… Ahora que ya está localizada

Un grupo de investigadores de la Universidad de Kioto ha encontrado las fuentes de la felicidad. Sí, ya se sabe dónde están. Y no viene sola sino acompañada de dos facultades tan importantes o más que la misma felicidad. ¿Dónde está? ¿Quiénes son esas compañeras? Te lo contamos a continuación.

Parecía imposible de encontrar. Incluso hace unos meses hicimos referencia a ella en este blog y de su posible ubicación según una vieja leyenda india. El misterio lo ha desvelado un grupo de investigadores de la Universidad de Kioto. Y para se adentraron en la misteriosa selva que es nuestro cerebro cuan David Livingston buscando las fuentes del Nilo; ellos buscando la felicidad. Armados de resonancias magnéticas, examinaron el cerebro de arriba abajo con distintos participantes que previamente pasaron un test para conocer su grado de felicidad habitual, la intensidad con la que sentían las emociones y la satisfacción de sus vidas.

Y la encontraron. En una zona denominada precúneo, que es una zona del cerebro. ¿Y cómo lo supieron? Porque los participantes en esta prueba que obtuvieron más materia gris en dicha zona eran los más felices. Y, a su vez, los que tenían un precúneo más grande sentían la tristeza con menos intensidad y eran capaces de encontrar sentido a la vida.

¿Qué es el precúneo? Situada entre los dos hemisferios cerebrales, en la zona posterior, es una de las regiones con mayor número de conexiones de la corteza cerebral y actúa como un nodo logístico que permite el procesamiento de la información de forma consciente. Un área más evolucionada en los humanos que en el resto de animales –primates incluidos-, que tarda más en madurar dentro del cerebro y fundamental para manipular las imágenes mentales. Y es allí donde toma cuerpo el sentimiento subjetivo de la felicidad. Lo que explica el por qué las personas felices tienen ese nodo de comunicaciones más grande, son más creativas, aprenden mejor, etc.

Decíamos en la entradilla de este post que la felicidad venía acompañada de dos facultades tan importantes o más que la misma felicidad. ¿Cuáles? En el precúneo toman cuerpo el sentimiento subjetivo de la felicidad, que es la resultante de integrar un componente emocional –las emociones, como puede ser experimentar más placer y menos desagrado- y otro cognitivo –evaluar la satisfacción de su propia vida. Es el caso de la confianza-.

¿Puede existir un componente genético? No es descartable, aunque no de los investigadores de la Universidad de Kioto apunta que también se puede fortalecer esa parte del cerebro para obtener de ella el rendimiento deseado. Por ejemplo, se puede alcanzar la felicidad mediante la meditación, que aumenta la materia gris del precúneo.

Así que, si quieres alcanzar un estado de felicidad permanente, ¡a estimular el precúneo se ha dicho! ;-)

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Fuente: ABC