Píldora de la felicidad 1: genera el cambio a traves de rituales
En Emotion nos hemos propuesto que seas feliz. Y para eso cada semana te iremos dando una serie de píldoras que te permitirán alcanzar ese estado de felicidad que deseas. Todo depende de ti. Y hoy queremos que empieces desde el principio cambiando algunos de tus rituales. Y aunque parezca difícil, no lo es.
Si estás leyendo este post es que la semana pasada te diste cuenta de que puedes ser feliz de verdad con un poco que pongas de tu parte. Ahora, es posible que tengas dudas porque te consideres satisfech@
con tu vida actual, tal y como es. ¡Enhorabuena, no todos pueden/podemos decir
lo mismo! Pero tengo que decirte algo importante: la felicidad no es algo que
tenga fin….
¡La buena noticia
es que siempre se puede ser más feliz!
Por eso, vamos a empezar por el principio.
Cuando nos planteamos un cambio personal
debemos tener claro no sólo qué queremos cambiar, sino también cómo queremos
hacerlo. En esta serie de post vamos a ir sugiriéndote el QUÉ, pero en este
primero podemos plantearnos el CÓMO.
La mejor forma de generar cambios personales
es sustituir la disciplina (los debería, los tengo que….) que no nos motivan en
absoluto, por la fórmula de los rituales. Y nos explicamos: los rituales son maneras de
introducir cambios poco a poco que consigan que se genere en nosotros un hábito
y que, por lo tanto, no supongan esfuerzo. Eso hará que el cambio sea cómodo y
fácil y generará motivación.
Más precisos si cabe: si deseas introducir en tu
vida las ideas que vayamos sugiriendo semanalmente en el blog utiliza la técnica
del ritual que vamos a explicar a continuación para que lo consigas sin
demasiado esfuerzo y así obtener gratificación desde el primer momento.
Hablamos de felicidad ¿no?
Pues los cambios también placenteros.
En nuestro caso, no hace demasiado no practicábamos actividad física alguna. Nos daba mucha pereza meternos en un gimnasio a pasarlo
mal, sudar un montón, perder tiempo, trasladar una bolsa de deporte pesada, sufrir
un montón de agujetas… Pero nos lo proponíamos y empezábamos a darnos “caña” cada día
sin piedad. Aunque comenzábamos con mucha motivación, enseguida nos íbamos del gimnasio,
con la consiguiente frustración y la consecuente aversión por el ejercicio.
Hasta que nos lo planteamos como un ritual (entonces no sabíamos que lo hacíamos).
Primero reflexionamos sobre qué actividad física nos iba mejor (una de sudar
poco, elegimos hacer yoga), y después empezamos a practicarla los miércoles. Nos sentíamos bien después de acudir a las clases, así que aumentamos a dos, y
luego a tres días a la semana. En los últimos años no hemos dejado de practicarlo
porque no nos cuesta trabajo, nos produce placer y mantiene en forma. ¡Y nos encanta!
Resumen: Técnica
para introducir cambios en tu vida (ritual/hábito):
· Define claramente qué quieres introducir: por ejemplo, no trabajar fuera del horario, como salir a las seis de trabajar.
· Dosifica esa introducción. Recuerda: los rituales son pequeñas
cosas que hacemos cada día. Por ejemplo, esta semana no me excederé más de 30 minutos por día; la semana siguiente, no más de 15; la tercera semana me iré a la 6 con todas las consecuencias.
· No introduzcas más de un ritual
cada semana.
Espera hasta conseguir que el anterior se haya convertido en hábito antes de
introducir un ritual nuevo.
· Siéntete orgulloso por cada pequeño
logro.
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